
Pese a que su vínculo contractual con el “Lobo” caducaba dentro de seis meses, el ex jugador de Sportivo Italiano, Ferro, Olimpo y Godoy Cruz, entre otros, decidió irse a raíz de no haberse adaptado al equipo y no rendir de la forma en que lo esperaba su entrenador Omar Labruna, quien ya lo conocía de su paso por la entidad aurinegra de Bahía Blanca.